Para una medición óptima del crecimiento académico se requiere una escala
unidimensional, continua, a iguales intervalos, de desarrollo e invariable con
respecto a la ubicación y el tamaño de la unidad. Estas características pueden
obtenerse combinando la medición Rasch con una teoría de constructos de lectura
operacionalizada y el anclaje de la escala resultante en dos puntos en un continuo
de complejidad de texto. De esta manera, personas y textos se juntan en una escala
de desarrollo común. Así, una iniciativa de política educativa de Estados Unidos de
América (EE.UU.) recomendó incrementar la exposición de los estudiantes a textos
complejos. El estándar de exposición a textos puede examinarse en forma productiva a
la luz del crecimiento histórico de la lectura si ambos se miden con una escala común de
base teórica. El modelado paramétrico de curvas alternativas de crecimiento promueve
un debate sobre cómo los estudiantes pueden alcanzar el objetivo de estar preparados
para la universidad y para una carrera.