Este artículo analiza las políticas educacionales durante los siete años del gobierno de Francois Mitterrand. Sostiene la tesis de que, si bien era un gobierno de izquierda, la actuación política camina en una línea de reformas más que de cambios de naturaleza revolucionaria. Bajo esa perspectiva, estudia los dos campos más importantes de acción gubernamental: por una parte, la renovación y consolidación del servicio público de la educación nacional y, por otra, el desarrollo de la educación privada. Ambos aspectos constituyen, a juicio del autor, los puntos cruciales y más característicos de la opción y el camino adoptado.